Las etapas de la mediación son:
0. Pre mediación:
En esta primera etapa se define el caso que se va a mediar, quién actuará como mediador, en que lugar se realizaran las sesiones y el tiempo que se dispondrá para estas.
Ejemplo: En la sala de 5° año dos alumnas se pelean por un lápiz, al parecer Paula lo dejo olvidado el día anterior y hoy como Juana no trajo lápiz saco éste del estante del curso donde queda la mayoría de los objetos olvidados. Juana y Paula no dejaban de discutir, por lo que la profesora toma la decisión de pasarle otro lápiz a Juana para que continúe escribiendo y no devolverle el otro a Paula, sino que citarlas a ambas al término de la jornada para hablar de lo sucedido.
El caso que se va a mediar es la pelea por el lápiz, la profesora será la mediadora y el lugar elegido será la sala de clases donde dispondrán de tres sillas en la parte delantera de la sala estando la profesora en medio de ambas, siendo en una sesión única de 15 a 20 minutos.
1. Entrada:
El mediador en esta fase debe mostrar su neutralidad ante el conflicto de las partes y tratar de obtener la confianza de estos, además de fomentar su participación y respeto en el dialogo.
Ejemplo: siguiendo el mismo ejemplo anterior, la profesora explicara porque las citó a ambas y que es lo que harán, la manera en que se desarrollara la mediación y como ambas podrán participar de manera respetuosa para llegar a una solución.
2. Explica:
En esta etapa cada uno de los implicados tiene la oportunidad de explicar su versión del conflicto, el mediador sin emitir juicio alguno solo escucha, parafrasea y anima a los participantes a plantear todos los temas posibles, equilibrando el poder y neutralizando los comportamientos negativos.
Ejemplo: Acá la profesora le da la palabra a una de las alumnas y luego a la otra, para que cada una explique su versión del conflicto y el porque de la reacción negativa de ambas, la profesora intervendrá solo cuando sea necesario para confirmar las versiones y aliviar un poco la tensión de la situación, fomentando al dialogo y a la sana convivencia, y preguntando en el caso de que algún aspecto no sea claro o bien especificado.
3. Situarnos:
En esta etapa se define el problema a través de la información obtenida, se trata de que sea aceptada por las dos partes y se separan los temas no mediables.
Ejemplo: Esta más que claro que el problema que se intenta mediar es la pelea por un lápiz de dos alumnas de 5° año, dejando de lado aquellas diferencias que las alumnas ya tenían y que influyó en el enojo e inicio del conflicto, por lo que solo se centrara en buscar la solución al problema principal.
4. Arreglar:
El mediador manteniendo su neutralidad debe plantear hacia donde queremos llegar en la solución del conflicto o la manera de relacionarnos en el futuro para no volver a incurrir en lo mismo, no ofreciendo soluciones, sino promoviendo el dialogo y la generación de ideas.
Ejemplo: Acá la profesora explicara a sus alumnas el porqué no debieron llegar hasta una pelea por un lápiz, explicándole a Paula que hay mejores maneras de decir las cosas y así mismo a Juana a que no debe reaccionar de mala manera cuando le digan alguna cosa que le disguste, se les preguntara a ambas cual seria una opción pacifica de haber enfrentado la situación y hacerles ver que si lo pudieron hacer así y que para una próxima oportunidad tendrán ya los conocimientos y la madurez para no pasar por lo mismo.
5. Acuerdo:
En esta última etapa debemos evaluar las opciones planteadas, midiendo sus ventajas e inconvenientes de su ejecución, fijando los acuerdos por escrito y en un lenguaje neutral, especificando de qué forma se llevarán a la práctica.
Ejemplo: Paula evidencio que no debió reaccionar así y que debió dejar que Juana escribiera con su lápiz pues ella ya tenia otro y para Juana era necesario, por su parte, Juana asume que no debió responder de manera agresiva a Paula, sino que de forma amable decirle que sabe que el lápiz es de Paula, si se lo prestara por la clase y que se lo devolvería al fin de la jornada. Estas son las conclusiones obtenidas por ambas, en donde se puede rescatar que las dos reconocen que debieron actuar de una mejor manera, por lo que se llega a la conclusión de que el dialogo y la comprensión son la mejor manera de enfrentar una situación engorrosa, a la que ambas asumen el compromiso de no volver a cometer.
